La madre, de 20 años, denunció que la doctora Fabiola Avilés, del Hospital Municipal de La Pampa de la Isla, la mandó de vuelta a su casa cuando ella ya sufría dolores de parto. Luego de lo mencionado, el feto murió en su vientre.
En palabras de la joven madre, la doctora habría rehusado atenderla, a pesar de que ella llegó al centro médico con dolores de parto. La madre habría pedido que se le realice una cesárea en vista del sufrimiento ocurrido, sin embargo, la doctora le habría dicho que el nacimiento ocurriría por parto normal.
Aquello ocurrió incluso cuando Rubí Quispe, la madre, ya contaba con las 38 semanas de embarazo, mas 3 días. Ante los dolores ella acudió al centro médico, pero fue enviada a su casa por la mencionada doctora, quien alegó que solo contaba con 3,5 centímetros de dilatación, y que debía llegar a los 4 centímetros para dar a luz de forma natural, prometiendo inyectarle un suero entonces para que ocurriera el nacimiento.
Al día siguiente Rubí experimentó sangrado. En el hospital, fue atendida por otro médico quien determinó que el feto ya no tenía latidos.
El cadáver, sin embargo, ahora se encuentra en la morgue, en tanto que la familia sería de escasos recursos. La causa de la muerte se habría determinado como asfixia prenatal.