La madrugada del 10 de noviembre los vecinos del barrio Latino quedaron aterrorizados al encontrar a dos jóvenes llenos de sangre, uno sin vida y el otro agonizando, ambos se encontraban en vigilia en su punto de bloqueo a donde llegaron los autores del delito en una moto y descargaron su furia.
El sobreviviente contó que el fallecido José Eduardo Sosa Gómez fue su mejor amigo desde los 10 años, vivieron en el mismo barrio y decidieron apoyar el paro cívico solo en las noches porque durante el día trabajaban de mecánico.
Por este crimen se encuentran detenidos en la cárcel de Palmasola el autor y el cómplice quienes solicitaron en las ultimas horas defenderse en libertad.