El ministro de Relaciones Exteriores, Rogelio Mayta, informo este martes que se logro llegar a un acuerdo para que la boliviana no tenga pena de muerte.
La mujer está detenida desde el 2019 por trasportar al menos 2 kilos de cocaína en el aeropuerto de Kuala Lumpur.
La fiscalía accedió a cambiar la acusación, pasando de ser inicialmente, tráfico de drogas a posesión de sustancias ilícitas, con una pena menor
“Se presentó la prueba de cargo y la Fiscalía aceptó llegar a un acuerdo, cambiar la acusación, bajo la condición que la acusada se declare culpable, la jueza aceptó y ya no se continúa el proceso por narcotráfico sino por posesión de drogas, y eso evitó la posibilidad de una condena a muerte”, dijo el canciller.
El canciller contó que la joven boliviana, entre las primeras cosas que pidió, fue saber cómo está su familia y una Biblia, ya que estaba en un país desconocido y “sometida a una Justicia que no terminaba de entender, sin siquiera poderse comunicar”.