El futbolista de 41 años, debido a una gran lesión en la rodilla, no jugará hasta el próximo año, pero lo último que tiene en mente es retirarse.
El delantero del AC Milan dijo: “La situación es diferente ahora por mi edad y con mis compañeros, pero estoy disfrutando cada día porque creo que, cuando deje el fútbol, lo extrañare tanto que no querré arrepentirme diciendo ‘Debí haber seguido jugando’”.
“Trato de mantenerme en el nivel de estos jóvenes trabajando duro y manteniendo el ritmo” agregó Zlatan.
Esa lesión fue tan grave que amenazó con acabar con su carrera.