Al menos cinco árboles cayeron en distintos puntos del municipio de Quillacollo. Además de cables rotos y focos destrozados.
Las fuertes ráfagas de viento ocasionaron que un árbol de gran tamaño cayera sobre el techo de la unidad educativa Urkupiña. Hubo daños materiales, afecto los ambientes de la cocina y biblioteca.
Se puede ver que el árbol se desprendió desde la raíz y levantó las losetas de cemento.
Afortunadamente no se reportaron accidentes personales porque justo en ese momento los estudiantes pasaban clases de baloncesto.