Hace dos paros que Mauricio Martínez, jefe de la Unidad de Cuidados Intensivos (UTI) de la Caja Nacional de Salud (CNS), se dio cuenta de que necesitaba una motocicleta para asistir a su fuente laboral.
A diferencia de otros colegas, y al ocupar una jefatura médica, Martínez debe moverse todos los días desde su domicilio, ubicado por el quinto anillo de la avenida Fuerza Aérea Boliviana (ex Santos Dumont), hasta el Hospital Obrero de las 400 camas, por la zona de tercer anillo y Mutualista.
Reconoce que, de uno u otro modo, médicos, enfermeras, administrativos, en resumen “todo el personal que trabaja en una institución de salud”, se ve afectado, pero entiende que el sacrificio es en pro del beneficio que se podrá conseguir al final. “Nosotros apoyamos el paro en 2023, al 100%”, aclara.