La abogada animalista de Zoonosis, Paola Abrego, mencionó que el hombre no se mostró arrepentido, es más seguía señalando que le molestaba los ladridos de los canes.
Paola, dijo que el hombre rocío ácido a Firulais, el chihuahua de dos años que casi pierde la vista, motivo por el cual el vecino tuvo una sanción muy grave y que deberá hacerse responsable de los gastos de la veterinaria del perrito. Además están presentando una demanda penal por lo que hizo.