Publicaciones referidas a violencia de cualquier género y forma son los motivos por los que el gobierno de El Salvador está haciendo seguimiento a los periodistas, argumentando que podrían incurrir en apología.
El ministro de seguridad, Gustavo Villatoro fue quien hizo la polémica revelación argumentando que la libertad de expresión tiene un límite. En este sentido es que Villatoro basó sus argumentos en distintas publicaciones de periodistas que centraron su redacción en la violencia.
El Presidente Nayib Bukele, en constantes ocasiones expresó de forma abierta sus críticas a ese tipo de publicaciones especialmente las emitidas por medios digitales como El Faro, Factum y Gato Encerrado.