Cada vez son más los hogares donde los progenitores cuidan a sus hijos sin el apoyo de su pareja. Es el caso de Pablo Acuña de nacionalidad paraguaya. El no tiene brazos ni piernas y su esposa lo abandonó con sus dos pequeñas cuando tenían tan sólo cuatro meses de nacidas.
Al momento de su nacimiento no logró desarrollarse, por lo que depende de una carretilla y una persona para que lo pueda trasladar. Su madre, la señora Ignacia, aseguró que a pesar de las dificultades, Pablo siempre fue el más alegre de sus seis hijos.
Elida de 26 años es su hija menor, quien aseguró que jamás lo vio triste y que su padre es el mejor del mundo, su confidente y su mejor amigo. También indicó que su progenitor usa el celular y el control de la televisión con su nariz para marcar números o cambiar canales.
Su carretilla son sus piernas e incluso duerme en ella. Según Acuña se siente más cómodo ahí. Apesar de las dificultades logró sacar adelante a sus hijas con la ayuda de la abuelita.