Un acuerdo que permita la retirada de las tropas rusas, que ayer mantenían la ofensiva y siguen causando víctimas civiles. Mientras tanto, Estados Unidos autorizó el envío masivo de ayuda militar a Ucrania, a pedido del presidente Volodomir Zelenski.
En el vigésimo primer día de la invasión, un teatro de la asediada ciudad de Mariúpol, que servía de refugio a cientos de civiles, quedó reducido a escombros por un ataque ruso, causando un número indeterminado de muertos, de acuerdo con fuentes ucranianas.
El presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, ha reconocido que las posiciones en las negociaciones son ahora “más realistas”, mientras el ministro ruso de Exteriores, Serguei Lavrov, ve “cerca” el acuerdo con Ucrania sobre las garantías de seguridad.
“Hay una serie de formulaciones de los acuerdos con Ucrania sobre el estatuto de neutralidad y las garantías de seguridad que están a punto de lograrse”, declaró este miércoles Lavrov, según informaron las agencias rusas.
Un asesor de Zelenski, citado por el FT, reconoce que Kiev estaría dispuesto a abordar por separado el estatus de Crimea y de los territorios del Donbás, cuya independencia fue reconocida por Moscú antes del comienzo de la invasión, el pasado 24 de febrero.
El acuerdo contemplaría en cualquier caso una retirada total de las tropas rusas del territorio ucraniano por el que han avanzado desde el día de la invasión.
Pese a que las negociaciones cumplieron ayer su sexto día, la ofensiva rusa en Ucrania siguió en marcha y se cobró nuevas víctimas civiles en su vigésimo primer día.
Según informó ayer el Servicio Estatal de Comunicaciones Especiales y Protección de la Información de Ucrania, al menos 10 personas han muerto en la ciudad de Chernígov, en el norte de Ucrania, cuando al parecer tropas rusas dispararon contra una fila de ciudadanos que esperaban para comprar el pan.