Por medio de un pronunciamiento oficial los jugadores del equipo atigrado decidieron no participar de ningún torneo extraordinario.
Expresaron su “molestia colectiva” y señalaron que deja un “mal precedente, castigando a todos por las acciones de unos pocos” ya que el club se encontraba primero en la tabla de posiciones y que “nada garantiza que en este nuevo campeonato ocurra lo mismo”.
Por segundo año consecutivo, el equipo se quedó con las ganas de lograr el título.
El pasado año, debido a los conflictos en Santa Cruz por un paro ocasionó que el Consejo Superior de la División Profesional de por concluido el campeonato.
Y ahora en esta segunda ocasión, cuando el club de Achumani se encontraba liderando la tabla de posiciones se decidió este martes anular los dos torneos de este año ante denuncias de corrupción y amaño de partidos.
El presidente del elenco “gualdinegro”, Héctor Montes, consideró como un castigo en contra de su club y el trabajo que vino realizando durante estos meses y su aspiración de alcanzar el título.