Este sábado comenzó en Rusia a aplicarse la vacuna Sputnik V a los trabajadores con alto riesgo de contaminarse del coronavirus en la capital de Moscú.
Para ello se dispuso de 70 nuevos centros de vacunación en toda la ciudad y las vacunas están destinadas inicialmente para trabajadores sociales, personal médico y maestros.
Sin embargo, se conoció un dato desconocido sobre la vacuna rusa: recomiendan no beber alcohol durante 42 días a quienes la hayan recibido, por los posibles efectos secundarios que podría tener.
Según la viceministra Tatiana Golikova, y quien supervisa los esfuerzos de respuesta de Rusia al Covid-19, la ingesta de alcohol podría inhibir el sistema inmunológico del paciente.
“Organizaremos el proceso para que la vacunación a gran escala comience a finales de la próxima semana. Los vacunados deben evitar los lugares públicos y reducir la ingesta de medicamentos y alcohol, que podrían inhibir el sistema inmunológico, dentro de los primeros 42 días después de haberse aplicado la primera de las dos dosis”, señaló.
Por su parte el alcalde moscovita, Serguei Sobianin, aseguró que la administración de las primeras dosis era para las personas de grupos de alto riesgo. La ciudad cerró todos los lugares públicos, incluidos parques y cafés, a fines de marzo y puso a la Policía a patrullar las calles, según señala DW.
La vacuna rusa se encuentra actualmente en la tercera y última fase de ensayos clínicos, en los que participan 40.000 voluntarios. Hay que recordar que el mes pasado Moscú anunció que la Sputnik V tiene una eficacia de 95%, según los resultados provisionales.
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