Un niño de dos o tres años de edad fue encontrado en medio del bosque en el municipio de Riberalta, en el Beni.
El menor fue encontrado por Saúl Pareja Álvarez, ciudadano que había salido con sus dos hijos en busca de remedios naturales. Al oír llorar al pequeño, el hombre pensó que se trataba de un jaguar. Sin embargo, hizo caso a su instinto, se acercó al ruido, y encontró al niño sentado, llorando, y con picaduras en el rostro.
El hombre llevó al niño a su domicilio. Su esposa tomó fotos del niño y las envió a sus vecinos, pero nadie pudo identificarlo.
La Fiscalía departamental de Beni investiga el caso. De momento, el menor se encuentra en el hospital Materno Infantil de Riberalta.
Fuente: El Deber.