La tripulación francesa de la embarcación “Pipilintu”, construida con totora del Lago Titicaca, alcanzó aguas internacionales del Océano Atlántico luego de recorrer 3.600 kilómetros. La travesía comenzó en Guanay, Bolivia, y destaca por su valor histórico y cultural, demostrando la resistencia y habilidad en la navegación ancestral.