No cabe la menor duda de que fumar cigarrillos es nocivo para la salud, pero si del cannabis se trata, muchos afirman que su consumo no tendría porqué repercutir. Sin embargo, lo cierto es que muchas personas desconocen los perjuicios que tiene esta sustancia y lo cuán adictiva que podría llegar a ser.
Marihuana, termino empleado para referirse a las flores, hojas, tallos y semillas secas de la planta del cannabis, planta que tiene mas de 100 compuestos, entre los que resaltan dos que están presentes en la sustancia: el tetrahidrocannabinol (THC), psicoactivo que altera el funcionamiento del cerebro, y el cannabidiol (CBD) que no afecta el funcionamiento de la mente y al cual se han llegado a asociar algunos beneficios en algunas circunstancias.
La marihuana afecta especialmente aquellas partes del cuerpo cuyas funciones son las de la atención, la coordinación, la toma de decisiones, el aprendizaje y la memoria.
El uso de la marihuana regularmente trae consigo efectos a largo plazo, pero también existen algunos vinculados con su consumo a corto plazo.
El impacto de la marihuana en el cerebro puede resultar particularmente perjudicial para el desarrollo cognitivo de los jóvenes y el de sus cerebros.
Como una cuestión de hecho, consumir antes de los 18 años puede afectar los funcionamientos del cerebro tales como la atención y el aprendizaje. Como resultado, los adolescentes que la consumen podrían tener un rendimiento menor en la escuela.
Un estudio danés publicado en 2021 en la revista medica JAMA PSYCHIATRY confirmó un aumento en los casos de psicosis, en la que el consumidor llegaría a perder el contacto con la realidad y podría, por ejemplo, escuchar voces o delirar.
Por otro lado, algunos patrones de desorden de sueño están relacionados con el consumo de la marihuana. Una investigación publicada en 2021 estudio a consumidores y descubrió que los adultos que habían consumido 20 o más días durante un mes tenían 64 % de probabilidades de dormir menos de seis horas por noche y un 76 % mas de probabilidades de dormir más de nueve horas por noche. En ambas situaciones las horas de sueño quedan por fuera de las recomendaciones.
Tanto el sueño corto como el sueño largo se relacionan a un mayor riesgo de ataques cardiacos y accidentes cerebrovasculares.
Es preocupante sin duda alguna que el incremento de consumidores crezca de manera desmedida, sobre todo porque muchos de ellos son jóvenes, jóvenes que no saben tampoco lo cuan adictiva que es la marihuana, en realidad, ha sido comprobado que tres de cada 10 personas que consumen esta droga, padecen de un trastorno por su consumo, lo que significa, que no pueden dejar de usarla.
Este riesgo es aún mayor para aquellos que la empiezan a usar en la adolescencia o la juventud, y para aquellos también que lo hacen de forma habitual.
Redactado por: Alejandro Ayo