El Gobierno de la Argentina reconoció la deuda de 230 millones de dólares a Bolivia que, correspondería a tres meses sin pagar, por el envió de gas natural en la pasada gestión.
El secretario de Energía de la Nación, Eduardo Rodríguez Chirillo, indicó que la administración del ex-presidente argentino, Alberto Fernández, dejó sin pagar la importación de gas desde Bolivia y debe “honrarse bajo apercibimiento de corte” por parte de YPFB.
El jueves 4 de enero, el presidente del Banco Central de Bolivia, Edwin Rojas, expresó que la deuda llegaba a 212 millones de dólares (monto menor a lo que indica el Gobierno argentino). Rojas señaló que con estos recursos se habrían fortalecido las reservas internacionales, por lo que se espera recibir pronto las divisas.