El extraño planeta enano Haumea ha ofrecido una nueva sorpresa a los astrónomos, como si de un planeta gigante se tratara, tiene un anillo de unos 70 kilómetros de grosor orbitando a su alrededor.
El descubrimiento, ha sido posible gracias a una campaña internacional de observaciones del planeta liderada por José Luis Ortiz, del Instituto de Astrofísica de Andalucía (CSIC).
En las observaciones participaron doce telescopios de seis países aprovechando una rara oportunidad en que Haumea eclipsó una estrella lejana.
Situado en estos momentos tan lejos del Sol como Plutón, o unas 50 veces más lejos que la Tierra, Haumea ha intrigado a los astrónomos desde que se anunció su descubrimiento en 2005.
Las observaciones iniciales indicaron que debía medir casi 2.000 kilómetros en su lado más largo. Extrañó su forma oval, ya que los astros de este tamaño suelen ser esféricos.
Se llegó a la conclusión que tanto el planeta como sus lunas eran fragmentos de un astro mayor que fue destruido en un pasado remoto por algún gran impacto. La Unión Astronómica Internacional le llamó Haumea en honor a la diosa hawaiana de la fertilidad.