Fue “grr y mi corazón casi se detiene” dijo David Miguel, el niño que encontró al puma. Ante semejante situación el niño corrió donde su padre, quien sin saber qué se encontraría en el baño, fue a revisar. “Pensé que iba a ser un ocelote, un perro salvaje o algo más. En el momento en que vi que el animal era de ese tamaño corrí hacia atrás” indicó.
El puma permaneció en el baño de la escuela hasta que se presentó personal capacitado para tranquilizar al animal y rescatarlo. En colaboración con el Instituto de Brasileño de Medio Ambiente y Recursos Naturales Renovables determinaron que se trata de un hembra.
El veterinario Marcos Mourao, que colaboró en la extracción y liberación de esta peculiar visitante, indicó que la razón por la que este ejemplar ingresó a la escuela es por la invasión de los espacios urbanos en los ecosistemas salvajes. “Sabemos que esto ha estado sucediendo debido al aumento de la deforestación, los grandes incendios forestales y la destrucción del hábitat natural de estos animales” indicó.