Al menos 38 personas murieron después de que fuertes lluvias azotaron Petrópolis, una ciudad de la región montañosa del estado brasileño de Río de Janeiro, informó este miércoles el gobierno local.
Las calles de la ciudad quedaron inundadas por los aguaceros y también hubo fallecidos por deslizamientos de tierra.
El presidente Jair Bolsonaro, que está de viaje en Rusia, dijo en Twitter que había pedido a los ministros que ayudaran a la ciudad y a las víctimas de la tormenta.