Mientras el Papa Francisco celebraba de manera habitual en la plaza de San Pedro en el Vaticano, le llegó una sorpresa de parte de Bolivia a través del monseñor monseñor Jesús Juárez, quien obsequió un cuadrito andino y una caja de chocolates sucrences que fueron entregados al sumo pontífice durante un tiempo de saludos que se dio en la celebración.
Un presente que hará deleitar su paladar en cada bocado, mientras recuerda a nuestra amada patria e intercede por nosotros en oración y ruego.
“El Papa me dijo que los chocolates estaban tan ricos, tanto el cuadro como los chocolates, que hasta me pidió la bolsa térmica para conservar los chocolates y comérselos poco a poco”, relató Juárez.
La audiencia general se llevó adelante el 11 de mayo y el tema de la reflexión fue la vejez; de hecho, el pontífice se disculpó por no poder caminar entre los fieles.