Las discusiones de los padres de familia pueden marcar la infancia de los niños.
María una joven de 28 años, tuvo una infancia marcada de violencia porque desde sus 6 años creció observando las constantes agresiones entre sus padres. En una ocasión pudo ver como su padre intentó quitarle la vida a su progenitora.”No quisiera que mis hijos pasen por lo mismo”, dijo.
Si los pequeños presencian las agresiones verbales y físicas, a largo o corto plazo, pueden reproducir la violencia o evitarla. Y en muchas ocasiones los niños pueden expresar la violencia que viven en sus hogares mediante los dibujos.