Alex, un niño de 10 años, enfrenta una difícil realidad al trabajar como lustrabotas en la puerta de su colegio para ayudar a su familia.
A pesar de las dificultades económicas, no abandona sus estudios y asiste a clases por la tarde con la esperanza de un futuro mejor.
Su historia ha conmovido a muchos, generando apoyo en la comunidad para mejorar sus condiciones de vida.