Ocurrió en un edificio residencial de Tel Aviv (Israel), escena que quedó grabada en las cámaras de seguridad.
Un vecino reportó lo ocurrido y dos hombres fueron detenidos, y liberados poco después a la espera de que avance la denuncia.
Según los medios locales, dos hombres ascendieron al elevador con el caballo, hasta el seto piso.
“Fui a visitar a un amigo”, explicó el dueño del animal al ser detenido.
Además, explicó que “es un caballo caro y lo habrían robado” si lo dejaba en la calle.
“En ninguna parte estaba escrito que se prohibiera traer un caballo”, se justificó.