Con el paso del tiempo, en muchas partes del mundo, lograron ir dejando de lado y de manera paulatina el racismo y la discriminación. Varias asociaciones y organizaciones se encuentran impulsando iniciativas para que la sociedad abandone los prejuicios. Sin embargo, aún existen personas que no pueden y terminan cometiendo actos repudiables.
Es el caso de Nicole Poole Franklin. Ella intentó matar a dos niños con su vehículo. Sucedió en el estado de Iowa, Estados Unidos, en diciembre de 2019. La mujer se encontraba conduciendo el motorizado cuando vio a dos menores afroamericanos caminando sobre la acera. Poole logró atropellar a uno de ellos. Al percatarse de lo que hizo huyó del lugar.
El mismo día, Nicole dirigió su auto hacia una joven de 14 años porque creyó que era de origen mexicano y volvió a delinquir. La víctima tuvo lesiones graves, incluyendo una conmoción cerebral.
Las autoridades informaron que la responsable fue diagnosticada con trastorno esquizoafectivo, ansiedad, depresión y estrés postraumático.
El Tribunal Estatal del Distrito Sur la sentenció a dos penas simultáneas de 25 años por los delitos de intento de homicidio y lesiones.