La crisis del combustible comienza a repercutir en la economía, y es que ante la falta de circulación del transporte de carga y también la distribución de productos a los principales mercados; se pudo conocer que el precio de la carne de pollo ahora oscila entre los 24 y 25 bolivianos. Según informaciones esto es debido a que la mercancía llega en menores cantidades y los comerciantes tienen que elevar los costos para poder sacar ganancias.