Ucrania y Rusia anunciaron la semana pasada un importante intercambio de prisioneros que puso fin a meses de gestiones para liberar a muchos de los combatientes ucranianos que defendieron una planta acerera en Mariúpol durante un prolongado asedio ruso. A cambio, Ucrania entregó a al aliado del presidente Vladimir Putin, Viktor Medvedchuk.
Entre los liberados, se encuentra Mykhailo Dianov, un soldado y músico ucraniano cuyas fotografías, que muestran un notorio deterioro físico tras permanecer bajo custodia rusa; el infante de la marina estaba dentro de la planta siderúrgica de Azovstal cuando fue sitiada en mayo de este año.
Más de 2.000 defensores, muchos en el Batallón Azov, salieron de los escombros de la planta, hacia el cautiverio ruso a mediados de mayo, poniendo fin a un asedio de casi tres meses a la ciudad portuaria de Mariúpol.
Dianov era fácilmente ubicable porque solía posar en las fotos haciendo el símbolo de la paz con su mano izquierda y posteriormente por siempre salir con su brazo derecho herido tras los combates en la guerra iniciada por Putin.
Las imágenes en las que sale el soldado fueron publicadas por el Ministerio de Defensa de Ucrania en las redes sociales. En su mensaje dijo que fue uno de los «afortunados» ya que, a diferencia de otros prisioneros de guerra, sobrevivió al cautiverio ruso.
El secretario general de Naciones Unidas António Guterres aplaudió los intercambios, a los que se refirió como “algo no menor”, pero añadió que “aún hay mucho por hacer para acabar con el sufrimiento causado por la guerra en Ucrania”, señaló su portavoz. Guterres reitera la necesidad de respeto a las leyes internacionales en el trato de prisioneros y seguirá apoyando más intercambios de prisioneros, indicó el vocero Stephane Dujarric.