El Hospital Universitario de Asuán en el Alto Egipto fue testigo de un extraño incidente hace unos días.
Un recluso de Asuán llegó a la sala de urgencias quejándose de un fuerte dolor de estómago.
Luego de realizar los exámenes y radiografías necesarias, se encontraron infecciones severas en el abdomen e intestinos.
Por lo que los médicos decidieron que era necesaria una cirugía urgente.
Los médicos extrajeron un objeto extraño del estómago del paciente, que fue el causante de la retención de alimentos e infecciones estomacales graves, según doctores.
Resultó ser un teléfono móvil envuelto en plástico, y el paciente admitió que se había tragado el teléfono hace 6 meses para evadir los controles en la prisión.
Agregó que no era la primera vez que se tragaba su teléfono móvil, ya que lo había hecho dos veces antes.
Médicos aseguran que el celular estuviera forrado con plástico evitó un desenlace peor.