Autoridades eslovacas anunciaron el miércoles que un oso mató a un hombre de 57 años, cuyo cuerpo despedazado fue hallado hace dos días, reactivando el debate sobre la prohibición de caza de este animal.
El cuerpo destrozado de un paseante fue hallado el lunes, rodeado de huellas de oso, en el valle de Bansko, a 250 km de Bratislava.
“El hombre fue mordido en la cabeza y en la nuca y una autopsia confirmó que murió como consecuencia de la heridas infligidas por un oso” subrayó Marina Debnarova.
El accidente generó la rabia de los cazadores, que reclaman la abrogacion de la prohibición de la cacería de osos.
“Hemos hecho todo lo posible para proteger a los osos. Ahora ha llegado la hora de que protejamos a la gente” afirmó el responsable de la asociación de cazadores eslovacos, Imrich Suba.