Desde este marzo y por un año, la Policía Boliviana tomará exámenes de conducción y test médicos para que el Servicio General de Identificación Personal (SEGIP) emita la licencia de conducir en poblaciones alejadas a las ciudades capitales del país.
El objetivo es recaudar recursos para los uniformados y que las personas que viven en esas regiones ahorren tiempo y dinero.