La exmodelo y presentadora, Linda Alpire, ha tomado una drástica medida en busca de justicia después de que su audiencia de imputación por violencia familiar fuera suspendida por tercera vez en once meses.
Al encontrarse nuevamente ante la frustración de la dilación de su caso, Linda Alpire se encadenó de manos y pies dentro del juzgado. La audiencia debía determinar la situación jurídica de Marco Antonio Ribera, su expareja y agresor. Sin embargo, el juez Roger Salvatierra, tercero en instrucción penal, optó por suspender la audiencia una vez más. Linda Alpire expresó su firme determinación de no moverse del lugar hasta que se haga justicia y su agresor sea imputado.