En la primera audiencia cautelar por el caso de trata, realizada el 14 de enero, los abogados de Evo Morales argumentaron que su defendido padece problemas de salud que le impidieron asistir a la citación del Ministerio Público. Como respuesta, el juez a cargo de la causa reprogramó la audiencia para el viernes 17 y ordenó una nueva revisión médica del expresidente.
El examen no se llevó a cabo y Morales denunció que el Órgano Ejecutivo instruyó a los médicos del trópico de Cochabamba a no brindarle atención, e incluso, se produjo el despido de un doctor.
Ante esta situación, la ministra de Salud, María Renée Castro, señaló que es “absolutamente falso que desde esta cartera de Estado se haya instruido la destitución de algún médico, ya que la emisión de certificados médicos no constituye causal de despido bajo ninguna circunstancia, y menos aún si se trata de un profesional del sistema privado de salud”.
“Rechazamos categóricamente estas acusaciones falsas y malintencionadas, que no hacen más que desinformar y generar confusión”, agregó Castro.