En la mansión Kirman todos anhelaban el regreso del nieto prodigo de la abuela Nujin, pero grande es la sorpresa cuando se enteran que Azad tuvo una terrible muerte. La tragedia no termina para la familia más poderosa de Turquía. Mientras todos lloran la muerte de Azad, Ali se muestra devastado por lo sucedido. Azad falleció por culpa de sus caprichos e impulsivas decisiones y es Zehra quien le hace notar cada uno de sus errores.