El primero en pronunciarse fue el presidente de la cámara automotora de Bolivia, quién aseguro que por año ingresan 25.000 autos indocumentados al país, poniendo el riesgo la fuente laboral de muchas familias qué trabajan en el rubro de la importación de vehículos legales, éstas cifras son alarmantes, debido a que la afectación económica al estado superan los 500 millones de dólares anuales.
Identifica qué el principal problema se registra en fronteras, considera que no se hace el trabajo adecuado para evitar el ingreso ilegal de estos vehículos, en muchos casos son inmersos en actos violentos y delictivos.
Desde el ámbito político también se refirieron al caso, desde la bancada de creemos aseguran que existe una desinstitucionalización de la policía y las fuerzas armadas entes encargadas de luchar contra el contrabando, por su parte, desde el movimiento al socialismo opinan que debe haber un cambio profundo dentro de la institución policial.