El Salzburgo, tras su alentador empate en Sevilla, se impuso por 2-1 al campeón francés, su primera victoria en la fase de grupos sobre un equipo de una de las cinco mejores ligas de Europa, y su segundo partido consecutivo definido por lanzamientos de penalti.
Adeyemi comenzó septiembre con un gol en su debut con Alemania ante Armenia y lo terminó con su primer doblete en la UEFA Champions League y el premio al Jugador del Partido. Al igual que contra el Sevilla, causó un gran impacto con su velocidad y carreras, lo que le llevó a forzar el cuarto penalti que ya ha logrado en esta competición, fueron sus desmarques en las rápidas transiciones del Salzburgo lo que le convirtió en una amenaza para la defensa del LOSC.
Al recuperar el balón, el Salzburgo buscó inmediatamente un pase rápido hacia adelante para aprovechar la capacidad de Adeyemi de alcanzar la línea de fondo. La jugada del primer penalti fue un ejemplo de ello, ya que, en una rápida contra, Brenden Aaronson sacó el balón de su propio campo y envió a Adeyemi en profundidad, donde Sven Botman le derribó. Adeyemi había forzado los tres lanzamientos de penalti del Salzburgo en el Sevilla y aquí lo había vuelto a hacer.
El joven de 19 años tuvo una segunda oportunidad desde el punto de penalti tras un lanzamiento de falta de Maximilian Wöber que golpeó en el brazo levantado de Burak Yılmaz después de que éste le diera la espalda en la barrera. Esta vez Grbić se lanzó hacia el otro lado mientras Adeyemi golpeaba el balón por abajo y por el centro de la portería.
Fuente: es.uefa.com