Considerado como el animal que más muertes causa en África entre los humanos, por delante de especies tan temidas como el tigre o el rinoceronte. Los hipopótamos poseen fuertes mandíbulas y largos colmillos que no dudan en emplear para atacar, además de su enorme peso.
Desarrollan un comportamiento muy territorial dentro del agua, estableciendo zonas de dominio por cada hipopótamo macho. Aunque son animales gregarios, tienen un comportamiento solitario.
Los hipopótamos tienen una única cría cada dos años, con un período de gestación de unos 200 días. En estado salvaje viven unos 40 años y unos 50 en cautiverio. Al ser animales semiacuáticos, los hipopótamos habitan en los ríos y lagos de África, en bosques y selvas densas y húmedas.
Durante mucho tiempo existió el mito de que los hipopótamos sudaban sangre, ya que desprendían una sustancia rojiza muy similar. Sin embargo, esta particular secreción es un pigmento natural de color rojizo que le sirve como humectante de la piel, como antiséptico contra los gérmenes, y también como protector solar.
A pesar de estar ubicado entre los animales más agresivos del mundo cuando se encuentra en el agua, el hipopótamo se ve cada vez más amenazado. Y es que el marfil de sus dientes, la delicadeza de su piel, así como su carne o han convertido en blanco de los cazadores furtivos.
Fuente: mundo.sputniknews.com