Don Severino se dedica a crear y vender batanes desde hace 27 años. Realiza los batanes de piedra en la localidad de Tapacarí. Viaja desde ese lugar hasta el municipio de Colpairhua.
Como a muchos, la pandemia también golpeó a la economía del señor, quien afirma que la demanda bajó severamente. Dice con tristeza que el promedio de venta por día es de uno o dos productos, o ni uno solo.
Aún así Don Severino no se dio por vencido. Señala que sigue más fuerte que una piedra y continuará así.
Severino tiene 8 hijos y solo uno de ellos ayuda al negocio de su padre.
El precio de los batanes varia dependiendo al tamaño de producto, desde 15.-bs hasta los 400.-bs.