Siente que te esfuerzas por agradar a tu pareja, te vas adaptando a sus planes, renuncias a cosas tuyas por estar con él o con ella… pasa el tiempo y de repente, un día, tienen una discusión o, sencillamente, no te sientes bien. Es en ese momento en el que una pregunta te surge con fuerza: ¿Cuántas cosas ha dejado de hacer por su pareja? ¿Estábien que lo haga?
Así es, pienso que tampoco hay que caer en el papel de ogro tratando de ver y solucionar todos los problemas en la vida de tu pareja. Parte del crecimiento personal y del respeto consiste en dejar que el otro decida por sí mismo, sin presiones. Preocúpate por siempre ser un apoyo para tu pareja.
De este tema, de la libertad emocinal de las personas, nos habla Claudio María Dominguez en el espacio “Protagonista de tu propia historia".