El reciente atraco en Apolo, que culminó en la muerte de una persona, ha encendido las alarmas en la comunidad, preocupada por la seguridad local. Las autoridades investigan cómo los delincuentes obtuvieron las armas utilizadas, mientras el comandante regional de El Alto, Adrián Álvarez, asegura que en el país no existe un mercado negro de armas, lo que aumenta la preocupación sobre la procedencia del armamento.