El pasado viernes tres ladrones ingresaron en un domicilio particular, dos de ellos escaparon hacia los cerros y uno de los antisociales fue capturado y linchado a punta de piedras y palos.
Ante la acción de los vecinos de la zona la Iglesia Católica condenó este domingo el linchamiento de personas y las lapidaciones de palabras en las redes sociales que arman una opinión mediática que se erige como tribunal inapelable, juzgando y condenado a la muerte moral de las personas e instituciones.
Durante la homilía dominical, el arzobispo de Santa Cruz, monseñor Sergio Gualberti, lamentó que siempre esté presente en nuestra sociedad el recurso de hacer justicia por mano propia, pese a estar penado por la ley de los hombres y ser un pecado gravísimo ante Dios.
“No se trata solamente de los linchamientos físicos, sino también morales. Las lapidaciones de palabra que hoy, en la era de la comunicación globalizada y de las redes sociales, se difunden por todo lado en forma incontrolable”, afirmó Gualberti.
Recordó la actitud de perdón de Jesús hacia una mujer acusada de cometer adulterio y fue apedreada por los fariseos. El prelado pidió a las personas imitar a Dios que siempre ofrece la oportunidad de una nueva vida.