En la Argentina, Victoria Ferreyra, la artista que transforma el dolor y la tragedia familiar en arte urbano denominado: “El egoísmo me aburre”
Desde el feticidio todavía impune de Lola Chomnalez hasta el brutal asesinato de Fernando Báez Sosa en manos de un grupo de rugbiers, la muralista retrata a las víctimas de violentos episodios para que su recuerdo perdure.
“Es un mural sobre un asesinato. Esa persona está muerta y el dolor es irreparable. Yo no estoy de pasada en esta vida, siento tristeza y alegría y eso es lo que plasmo”, explica Ferreyra.
Si bien la pandemia pospuso la realización de la obra, se llevó adelante un proyecto audiovisual y colaborativo en el que 36 artistas retrataron a Fernando en pequeños cuadros desde sus casas en Buenos Aires.